Villa Gesell: Kicillof y Larroque supervisan la búsqueda de desaparecidos tras el derrumbe del hotel

En medio de un clima de angustia y expectativa, el Gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, llegó este miércoles a Villa Gesell junto al Ministro de Desarrollo de la Comunidad, Andrés Larroque, para seguir de cerca las operaciones de rescate tras el trágico derrumbe del hotel Dubrovnik, que dejó a siete personas desaparecidas.

A más de 24 horas del desastre, Kicillof se unió al arduo trabajo que realizan bomberos y rescatistas en el lugar. Según informaron fuentes cercanas a la Agencia Noticias Argentinas, el Gobernador se comprometió a permanecer en la ciudad balnearia hasta que la situación esté controlada y todos los desaparecidos sean localizados.

Desde la mañana del martes, Javier Alonso, Ministro de Seguridad de la provincia, se encuentra en el lugar de los hechos. En una declaración contundente, Alonso afirmó: “No nos iremos hasta sacar la última piedra de escombros”. Aunque el principal objetivo es rescatar a las personas atrapadas, el ministro también indicó que su equipo se encarga de documentar meticulosamente la situación y recoger pruebas para garantizar que no haya impunidad en este trágico incidente.

El operativo durante la madrugada del miércoles se intensificó, con equipos de trabajo dedicados a la remoción de los escombros y a establecer contacto con posibles sobrevivientes. Para facilitar el trabajo en condiciones de visibilidad reducida, se habían instalado torres de iluminación, mientras que grúas especializadas se encargaron de mover los escombros más pesados.

El martes, un rayo de esperanza se presentó cuando un matrimonio fue rescatado; sin embargo, la tragedia también dejó su marca: un hombre de 89 años perdió la vida, y su esposa fue evacuada en helicóptero a Mar del Plata, donde se recupera de diversas lesiones, aunque no corre riesgo de vida.

Hasta el momento, los esfuerzos de los bomberos han permitido identificar a solo tres de los siete desaparecidos: Nahuel José Stefnic, Matías Chaspman y Mariano Troiano. La comunidad se encuentra en un estado de alerta, con diversas personas esperando noticias de sus seres queridos, mientras que las autoridades continúan trabajando sin descanso.

La tragedia en el hotel Dubrovnik ha puesto en relieve la necesidad de revisar las normativas de construcción y seguridad en la región. A medida que avanza el operativo de rescate, la población local aguarda con ansias información sobre sus familiares desaparecidos y respuestas sobre cómo pudo ocurrir un accidente de tal magnitud.

Los desafíos que enfrenta el equipo de rescatistas son enormes, pero la determinación de las autoridades y la solidaridad de la comunidad se alzan como pilares fundamentales en esta difícil jornada. Mientras tanto, el eco de la tragedia resuena en Villa Gesell, donde la esperanza y la angustia se entrelazan en un destino incierto.