Diciembre no da respiro a los bolsillos: llegan nuevos aumentos en el último mes del año
Con estos incrementos, el impacto sobre la economía diaria de los argentinos, plantea cuestionamientos sobre la efectividad de las políticas económicas del Gobierno, que lucha por reducir la inflación mientras los costos de vida siguen en ascenso. La situación exige urgente atención y medidas efectivas, o la crisis podría profundizarse aún más en el inicio del nuevo año.

A medida que se acerca el cierre del año, el panorama económico en Argentina se oscurece. Con un diciembre que promete ser particularmente complicado para los consumidores, diversos incrementos en servicios esenciales y bienes de consumo están generando crecientes dudas sobre la viabilidad de las expectativas oficiales de una reducción sostenida de la inflación.
Entre los aumentos más importantes se encuentra el precio de los combustibles, que comenzará a incrementarse desde este domingo.
Las petroleras anticipan un aumento de entre el 2.5% y el 3%, acumulando un total de 94.75% de alza desde enero. Esta situación se ve impulsada por la devaluación del peso y el incremento en los costos del petróleo en el mercado internacional.
Un nuevo golpe al bolsillo de los bonaerenses es la aprobación por parte del gobierno provincial de un incremento del 4% en las tarifas de electricidad, que se aplicará retroactivamente desde el 1 de noviembre. Este ajuste afectará a consumidores de La Plata y otras localidades que dependen de cooperativas eléctricas.
Los precios en el sector salud también se dispararán; se prevé que las prepagas apliquen un aumento que varía entre el 3% y el 4.7% en diciembre, totalizando un incremento del 121% en 2024, lo que supera la inflación del 2.7% registrada en octubre.
El Gobierno estuvo gestionando subas parciales en impuestos relacionados con el combustible, pero aún enfrenta la difícil tarea de evitar que estos aumentos agudicen la presión inflacionaria.
En el ámbito de la vivienda, el panorama es igualmente preocupante. Aunque el Índice de Contratos de Locación (ICL) muestra una leve baja interanual, los alquileres en contratos que deben renovarse a partir de diciembre registrarán un aumento del 10.69%. Para quienes alquilan con los nuevos contratos bajo el Código Civil, los aumentos prometen ser aún más fuertes.
Asimismo, AYSA, la empresa de agua potable, prevé un ajuste del 3% en diciembre, que se suma a un incremento acumulado del 317% en el año, dejando a la clase media y baja con un alto costo de vida.
La educación privada no se queda atrás, con incrementos en las cuotas que oscilan entre el 3.8% y el 6%, según la jurisdicción. Por ejemplo, en la Ciudad de Buenos Aires, un colegio primario con subsidio podría cobra cerca de $31,091 en diciembre, lo que causa un descontento generalizado entre los padres.
Por último, la Verificación Técnica Vehicular (VTV) también sufrirá ajustes, con un aumento del 21.83% en la Provincia, generando más inquietud entre los automovilistas, quienes verán sus gastos subir de forma considerable en un país ya castigado por la inflación.