1 de diciembre de 2025

El óxido nitroso, una esperanza para alivio rápido en casos graves de depresión resistente

Así lo revela un extenso análisis liderado por la Universidad de Birmingham, en el Reino Unido, que recopila los datos clínicos más sólidos disponibles hasta la fecha sobre su impacto en adultos con trastorno depresivo mayor (TDM) y depresión resistente al tratamiento (DRT).

El óxido nitroso, conocido como gas de la risa, podría convertirse en una opción efectiva para aliviar rápidamente la depresión grave y resistente a tratamientos tradicionales.

La depresión resistente afecta a casi la mitad de los pacientes en el Reino Unido cuando dos antidepresivos estándar no logran mejorar sus síntomas. Aunque el óxido nitroso se ha utilizado durante años como analgésico en entornos médicos, investigaciones preliminares sugieren que podría tener un efecto antidepresivo de acción rápida.

El estudio, publicado en la revista eBioMedicine, encontró que una sola sesión inhalada al 50% de óxido nitroso puede reducir significativamente los síntomas depresivos en un plazo de 24 horas. Sin embargo, estos beneficios tienden a disminuir en aproximadamente una semana. Por otro lado, dosis repetidas parecen ofrecer mejoras más duraderas, similar a lo observado con la ketamina, otro tratamiento de acción rápida que actúa sobre vías del glutamato en el cerebro.

«La depresión es una enfermedad que incapacita a quienes la padecen, especialmente cuando los tratamientos tradicionales no tienen éxito», afirmó Kiranpreet Gill, investigadora doctoral en la Universidad de Birmingham y autora principal del estudio. «Nuestra revisión indica que el óxido nitroso tiene potencial para brindar mejoras rápidas y significativas en pacientes con depresión grave a corto plazo», agregó.

La investigadora destacó que el óxido nitroso podría integrarse en una nueva generación de tratamientos de acción rápida, aunque subrayó la necesidad de realizar ensayos clínicos más amplios para definir dosis seguras y protocolos de administración repetida.

En cuanto a efectos secundarios, el estudio reportó náuseas, mareos y dolores de cabeza en algunos pacientes, especialmente a dosis elevadas, aunque generalmente de corta duración. No se identificaron riesgos inmediatos para la seguridad, pero los autores advierten que aún se desconocen los posibles efectos a largo plazo, debido a la escasez de estudios sobre el tema.

Este trabajo forma parte del proyecto del Mental Health Mission Midlands Translational Centre, financiado por el NIHR, dedicado a mejorar la atención a pacientes con depresión severa y resistente. Con la evidencia acumulada, el equipo prepara ahora el primer ensayo clínico en el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido para evaluar la seguridad y aceptabilidad del óxido nitroso como tratamiento para la depresión mayor.

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