El CyberMonday 2025 tuvo un consumo cauteloso: el papel higiénico fue el producto más vendido
La edición 2025 del CyberMonday, marcada por descuentos selectivos y un énfasis en artículos esenciales, confirma un cambio en el patrón de consumo digital: menos compras aspiracionales y más búsqueda de conveniencia inmediata, incluso en rubros impensados para liderar un evento de comercio electrónico.

La décima edición del CyberMonday dejó un dato tan llamativo como revelador sobre el comportamiento del consumo en 2025: el producto más vendido fue el papel higiénico.
En un evento históricamente asociado a grandes compras de tecnología y electrodomésticos, la preferencia por un artículo de primera necesidad expone la prudencia con la que los hogares argentinos enfrentaron esta edición.
Según datos difundidos por la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE), el evento —realizado entre el 3 y el 5 de noviembre— atrajo millones de visitas, pero solo una fracción de los productos ofrecidos mostró descuentos realmente atractivos. El reporte revela que los electrodomésticos registraron una baja promedio del 3,3% y los productos electrónicos apenas un 1,7%, generando un promedio de reducción del 2,5%, muy por debajo de ediciones anteriores donde las rebajas eran más amplias y generalizadas.
Las principales bajas se concentraron en equipos de recambio estacional como ventiladores (-6,7%), heladeras (-6,1%) y microondas (-6,4%). Consultoras privadas señalaron que, en casos puntuales, las caídas en ventiladores alcanzaron el 60%, anticipando la demanda del verano. También se observaron descensos moderados en cafeteras (-4,7%) y lavarropas (-5,5%), mientras que productos muy buscados como aires acondicionados, cocinas u hornos no mostraron rebajas significativas.
En el segmento tecnológico, únicamente teclados y auriculares ofrecieron reducciones destacables, del 10% y 5,9% respectivamente. La escasez de ofertas más agresivas en celulares o televisores sugiere un mercado cauteloso que privilegia el margen comercial ante la presión inflacionaria.
En este contexto, el éxito del papel higiénico —producto barato, cotidiano y almacenable— funciona como un termómetro del ánimo del consumidor: más que aprovechar oportunidades de gran gasto, el público se volcó a promociones que le permiten asegurar bienes básicos ante la incertidumbre.
