Tensión en el cordón agrario: despidos en John Deere (PLA) agudizan la incertidumbre laboral en Santa Fe
La prioridad actual es mantener un canal de diálogo constructivo con John Deere (PLA) para revertir la situación y evitar que los despidos se formalicen y se extiendan, en un momento donde la estabilidad del empleo es crítica para la región.

La planta de maquinaria agrícola PLA by John Deere en las rosas, provincia de santa fe, ha generado una nueva alarma en el sector metalúrgico tras la confirmación de nuevos despidos. Aunque las cifras oficiales de los recortes aún no han sido detalladas por la compañía, el hecho incrementa la incertidumbre en la localidad, cuya economía depende fuertemente de la industria metalmecánica.
La situación es de extrema preocupación para la Unión Obrera Metalúrgica (UOM). Ariel Astudillo, secretario general de la UOM seccional las parejas, ha manifestado que el gremio está monitoreando de cerca la crisis, con el objetivo primordial de preservar los puestos de trabajo y frenar una profundización de los recortes.
El impacto en la comunidad y el contexto industrial
El análisis de la situación revela un doble golpe:
Impacto socioeconómico local: La localidad de las rosas y sus alrededores tienen una fuerte vinculación histórica con la fabricación de maquinaria e insumos agropecuarios. Los despidos en una firma del calibre de John Deere, un jugador global, impactan directamente en la economía de la comunidad, agravando la ya existente incertidumbre social y económica en el cordón productivo. Cada puesto de trabajo perdido en este sector genera un efecto cascada que afecta a comercios y servicios locales.
Contrasentido de inversiones: El conflicto se produce a pesar de que la industria metalmecánica santafesina, incluyendo el sector de maquinaria agrícola, había sido destinataria de inversiones destinadas a ampliar la producción en años recientes. Este contexto previo de crecimiento hace que los despidos sean más difíciles de justificar y entender, sugiriendo una rápida contracción de la demanda o un reajuste drástico de la producción de cara al próximo ciclo agrícola.
El sindicato ha sido enfático en la necesidad de priorizar la continuidad laboral y exige a la empresa la implementación de medidas que protejan a los trabajadores afectados.
