Eugenia Bosco, medallista de plata en París 2024, denunció abuso sexual por su exentrenador
La causa ha sido derivada a la Unidad Fiscal Especializada en Género (UFE Género) de Vicente López, bajo la dirección de la fiscal Lida Osores Soler.

La regatista Eugenia Bosco, quien recientemente se colgó la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de París 2024 junto a su compañero Mateo Majdalani, ha decidido dar un paso al frente y denunciar públicamente el abuso sexual que sufrió a los 12 años por parte de su entrenador de la adolescencia.
En una emotiva entrevista con el diario La Nación, Bosco relató que el abuso tuvo lugar durante su formación en el Yacht Club Olivos, cuando competía en la categoría Optimist. «Sucedió cuando era muy chica. No sé cómo explicarlo, pero fue algo que pasó, que no lo controlé… lo aparté de mi vida hasta hace un par de años que lo pude ver», confesó la deportista, quien ha estado trabajando con un psicólogo para lidiar con el trauma.
La medallista reconoció que fue tras ver el documental de Netflix Athlete A que comenzó a tomar conciencia de su experiencia. «No podía creer lo que veía, y lloraba. Se me desbloqueó el recuerdo. Y pensaba: ‘Esto me pasó a mí’», compartió Bosco, quien finalmente encontró el valor para hablar con su familia sobre lo sucedido.
La valentía de Bosco ha tenido un efecto dominó, inspirando a otras mujeres a denunciar situaciones similares con el mismo entrenador, Leandro Tulia. Estas denuncias también están siendo investigadas por las autoridades.
A pesar de la gravedad de su testimonio, Bosco ha mantenido una actitud positiva tras su reciente éxito olímpico. «No siento que me haya opacado. Es aceptar que pasé por mil etapas de vergüenza, de no aceptarlo, de pensar que era la culpable. Después de un tiempo lo ponés en la mesa y decís: yo tenía 12 años y no estaba en control de la situación, ¿por qué no contarlo?», reflexionó la regatista.
El entrenador, cuya identidad ha sido confirmada, no ha respondido a las solicitudes de comentarios. Su abogado ha defendido la inocencia de su cliente, mientras que el Yacht Club Olivos ha optado por mantener una postura neutral, respetando el principio de inocencia.
La denuncia de Bosco no solo marca un hito en su vida personal, sino que también resalta la importancia de la comunicación y la denuncia en el ámbito deportivo, un espacio donde muchas veces se silencia el abuso. La comunidad deportiva sigue atenta a los desarrollos de este caso y al impacto que tendrá en la lucha contra el abuso en el deporte.
