El futuro de las reservas de oro de Italia en el centro de una polémica política
La disputa se reavivó durante la discusión del Presupuesto de 2026 en el Senado, donde una enmienda simbólica, presentada por el senador Lucio Malan de Fratelli d’Italia, fue aprobada. La propuesta establece que las reservas de oro gestionadas y custodiadas por el Banco de Italia pertenecen al Estado y, por ende, al pueblo italiano.

Italia vuelve a afrontar una discusión de gran relevancia política respecto a quién posee y controla las reservas de oro del país, valoradas en aproximadamente 300.000 millones de dólares.
Actualmente, Italia cuenta con cerca de 2.452 toneladas métricas de oro, siendo la tercera mayor reserva del mundo tras Estados Unidos y Alemania.
La mayor parte de estas reservas se almacenan en Roma, con otros depósitos en Fort Knox, Londres y Berna. Aunque tradicionalmente se ha entendido que dichas reservas sirven para beneficio nacional, formalmente figuran en el balance del Banco de Italia.
El debate surge en un contexto en el que el gobierno italiano intenta reconfigurar su presupuesto con un margen fiscal muy reducido, rechazando numerosas enmiendas presentadas en el proceso. La propuesta que afirma que las reservas de oro pertenecen al Estado, en nombre del pueblo, genera dudas sobre quién tendría la autoridad final sobre estos activos en caso de una modificación legal.
Dentro del sistema del Eurosistema, los bancos centrales nacionales como el Banco de Italia operan en coordinación con el Banco Central Europeo, manejando sus reservas de manera autónoma y sin instrucciones directas de los gobiernos nacionales. La enmienda, sin embargo, provoca un debate sobre la percepción de control y propiedad de estos activos estratégicos.
