EE.UU. podría apoyar a Ucrania para neutralizar infraestructuras energéticas dentro de Rusia
La medida supondría un giro importante y evidencia un ajuste en la postura de Washington, que refuerza su compromiso con Kiev a pesar de la negativa persistente de Moscú a negociaciones directas.

Estados Unidos estaría dispuesto a facilitar a Ucrania información de inteligencia para respaldar ataques de largo alcance contra objetivos de infraestructura energética situados en el interior ruso, según reportes de medios estadounidenses.
Se indica que la inteligencia proporcionada permitiría a Ucrania atacar refinerías, oleoductos, centrales eléctricas y otros activos situados lejos de las fronteras ucranianas. Además, Washington habría pedido a los aliados de la OTAN que adopten una cooperación similar.
Entre la información que podría compartirse figurarían imágenes satelitales y otros datos de vigilancia, potencialmente útiles para incrementar la precisión de los ataques en territorio ruso. En paralelo, la Administración estadounidenseevaluaría la entrega de misiles Tomahawk a Ucrania, capaces de alcanzar distancias de hasta 1.600–2.500 kilómetros.
Zelenski, en una intervención durante la cumbre de la Comunidad Política Europea en Copenhague, confirmó que había discutido esa posibilidad con el presidente estadounidense. “Hemos hablado con Estados Unidos. Agradecemos al presidente por este diálogo. Hemos hablado de armas de largo alcance”, afirmó el mandatario ucraniano. “Hasta ahora usamos principalmente nuestras armas. Después de nuestra reunión, tal vez tengamos algo más. Trabajamos para contar con el respaldo de Estados Unidos”, agregó.
Los misiles Tomahawk figuran desde hace tiempo entre las aspiraciones de Kiev. Con un alcance operativo amplio y una cabeza bélica considerable, podrían reforzar las capacidades de Ucrania para operar en profundidades dentro de Rusia.
Actualmente, Kiev depende en gran medida de armamento suministrado por Occidente, como los misiles Storm Shadow, cuyo alcance ronda los 250 kilómetros. Para ampliar su cobertura, Ucrania también utiliza drones y misiles nacionales como el Palianytsia, aunque su carga explosiva es menor.
En ese contexto, la cooperación en inteligencia con Estados Unidos podría fortalecer la estrategia de ataques profundos, mientras que la posibilidad de disponer de misiles Tomahawk podría transformar por completo la escalada estratégica.