Docentes universitarios convocan a una Marcha Federal y un paro de 48 horas en reclamo de mejoras salariales
La iniciativa, impulsada por la Federación Nacional de Docentes, Investigadores y Creadores Universitarios (CONADU), también contempla un paro de 48 horas en apoyo a estas demandas.
Este jueves 26 y viernes 27 de junio, las universidades argentinas serán escenario de la tercera Marcha Federal Universitaria, una movilización que busca denunciar el avance de los recortes y la falta de respuestas del Gobierno Nacional en materia salarial y de financiamiento.
La movilización, denominada “¡Prendete a defender la universidad pública!”, recorrerá distintas instituciones del país con actos y manifestaciones para visibilizar la situación crítica que atraviesa el sistema universitario. Los docentes exigen una actualización salarial urgente, frente a la brecha que desde diciembre de 2023 hasta abril de 2025 alcanza un incremento inflacionario del 204,8%, en contraste con un aumento salarial del 90,4%. La medida busca presionar a las autoridades para que retomen la discusión paritaria y aseguren un ingreso digno para los trabajadores del sector.
Además, los docentes reclaman que se trate en el Congreso la Ley de Financiamiento Universitario, un proyecto clave que busca garantizar recursos y sostenibilidad para la educación superior pública, inclusiva y de calidad. La medida cuenta con el respaldo de distintas federaciones y organizaciones académicas, incluyendo el Consejo Interuniversitario Nacional y la Federación Universitaria Argentina, que representan a rectores y estudiantes, respectivamente.
CONADU convocó a la comunidad educativa y a la sociedad en general a sumarse a esta jornada de protesta, en defensa de una universidad pública, gratuita y de calidad. La última medida de fuerza similar se realizó en junio, cuando los docentes llevaron adelante un paro de dos días para denunciar la falta de avances en las negociaciones salariales y el deterioro de las condiciones laborales.
La movilización busca poner en agenda la necesidad de una actualización salarial acorde a la inflación y de un financiamiento que permita sostener y potenciar el sistema universitario en Argentina.
