Victoria Villarruel guarda silencio mientras se profundiza el enfrentamiento con Milei
El conflicto entre el presidente Javier Milei y la vicepresidenta Victoria Villarruel sumó un nuevo capítulo, marcado por el silencio de la titular del Senado tras los fuertes embates del mandatario y de su círculo más cercano.

El vocero presidencial, Manuel Adorni, aseguró en conferencia de prensa que Villarruel “no integra el proyecto del Gobierno” y que esto no representa un obstáculo para la gestión.
“Todo el mundo sabe que la Vicepresidente no es parte del proyecto, no es parte del Norte, y el Presidente considera que no es parte de la gestión ya desde hace muchísimo tiempo”, afirmó.
Adorni relativizó la tensión institucional al señalar que “no hay ninguna novedad con eso” y que el Ejecutivo ha gobernado “con resultados bastante prominentes” pese a esa falta de sintonía. “Son cuestiones de la dinámica de todos los días de la política”, sostuvo.
El martes, Milei llevó el enfrentamiento a un nuevo nivel al tildar públicamente a Villarruel de “bruta traidora” durante su discurso en la Derecha Fest, un evento que reunió a dirigentes libertarios y referentes conservadores. Se trata del ataque más explícito contra su compañera de fórmula desde que ambos llegaron al poder en diciembre de 2023.
A diferencia de ocasiones anteriores, cuando la vicepresidenta respondió a las críticas en redes sociales tras ser acusada de “traidora” por el oficialismo, esta vez optó por el silencio. Fuentes legislativas señalan que la tensión se acrecentó después de las derrotas que sufrió el Gobierno en el Senado, donde Villarruel preside pero no controla el quórum.
En paralelo, persisten dudas sobre su asistencia al acto central de la Exposición Rural, que culminará el próximo sábado con un discurso de Milei, en el que se esperan definiciones sobre retenciones. La vicepresidenta está invitada formalmente, pero no confirmó su presencia. El último cruce público entre ambos se produjo en el Tedeum del 25 de mayo, cuando el Presidente evitó saludarla en la Catedral Metropolitana.
El enfrentamiento expone una inédita fractura institucional dentro del Ejecutivo: un presidente que desautoriza a su vicepresidenta y la excluye del rumbo político, en medio de un delicado equilibrio parlamentario y un clima social marcado por la crisis económica. La estrategia de Villarruel —el silencio frente a la escalada verbal— plantea interrogantes sobre su futuro político y su margen de maniobra en un escenario donde Milei busca concentrar todo el poder en la Casa Rosada.
