Independiente y Boca empataron debajo de un diluvio entre papelones y cancheros
En ocasiones, el fútbol no alcanza. Fue empate en el primer clásico de la temporada para dos equipos grandes, pero como en la cancha el condimento no es sólo futbolístico, un papelón lo empañó todo. Independiente – Boca, 2 a 2 en el marcador, finalizó con polémica, insultos y empujones por los secadores.
El partido entre el Rojo y los Xeneizes tuvo un final inesperado. Y la lluvia fue la culpable. El árbitro Facundo Tello cuando faltaban pocos minutos para el final, paró el juego y una situación insólita se llevó la atención de todos.
Sucede que cuando entraron auxiliares con secadores para acelerar el drenaje, los protagonistas terminaron a los empujones. Los jugadores de Boca Juniors protestaron porque consideraban que los auxiliares estaban utilizando los secadores para mejorar el sector en el que atacaba el Rojo y no hacían lo propio con la otra área.
En ese momento hubo quejas hacia el cuerpo arbitral por parte del Xeneize, pero los jugadores de Independiente se interpusieron y la situación se tensó, por lo que hubo gritos, insultos y varios empujones. Por esa insólita situación todo podría haber terminado en escándalo…
Finalmente, los cancheros y colaboradores lograron sacar la mayor cantidad de agua posible de las áreas con los secadores y, gracias a que la lluvia paró, el partido pudo reanudarse para disputarse cinco minutos adicionales que no modificaron la historia y el encuentro terminó 2-2.
