Cristina Kirchner reapareció con fuertes críticas al Gobierno y advierte sobre el rumbo del país
En un mensaje cargado de contenido político, social y simbólico, Cristina Fernández de Kirchner reapareció públicamente este viernes con duras críticas al Gobierno de Javier Milei, en el marco de un acto por el Día de la Bandera realizado en Parque Lezama.

La exmandataria optó por comunicarse mediante un audio grabado, en el que denunció maniobras de provocación, apuntó contra la ministra de Seguridad Patricia Bullrich y trazó un análisis crítico sobre la situación económica y el rol del Estado.
El acto, que congregó a una multitud de militantes y ciudadanos, había sido inicialmente convocado frente al domicilio de Cristina Kirchner, en San José 1111, donde cumple prisión domiciliaria. Sin embargo, ella misma solicitó el traslado al parque luego de denunciar un operativo policial nocturno que interpretó como una acción intimidatoria y sin respaldo judicial.
En su mensaje, la ex presidenta comparó la situación con los episodios de vallado que vivió en 2022 frente a su residencia en Recoleta y responsabilizó directamente a Bullrich por lo que calificó como una nueva “provocación” orientada a generar caos.
Lejos de limitarse a lo personal, Cristina Kirchner abordó la situación del país con un tono severamente crítico. Tomando como punto de partida el reciente dato de desocupación publicado por el Indec —que se ubicó en el 9,7%—, cuestionó duramente el ajuste fiscal del Gobierno. «Estos vinieron a hablarnos de futuro y solo nos traen lo peor del pasado», señaló, denunciando el desfinanciamiento de áreas clave como ciencia, salud, educación y obra pública.
A través de una fórmula punzante, sintetizó su diagnóstico: “Así cualquiera tiene superávit”. Y luego, dejó una de las frases más resonantes del mensaje: «La gente no come policías, ni tampoco come a Cristina presa», en clara alusión al uso de la represión como herramienta de control social y al discurso judicializador contra su figura, una estrategia persistente en sectores opositores desde hace años.
El mensaje también incluyó un llamado político de cara al futuro. Su hijo, el diputado Máximo Kirchner, abrió el acto convocando a “organizarse para que en 2027 seamos mayoría”, lo que marca la intención del kirchnerismo de recuperar centralidad en el escenario político nacional, con una narrativa que combina la resistencia al actual modelo con la promesa de un eventual regreso.
Cristina apeló además a la figura de Manuel Belgrano, a quien definió como su prócer favorito, para subrayar el carácter “patriótico” de la lucha que plantea. “Hoy como en ese entonces, la Patria también una vez más necesita ser defendida”, afirmó, en un cierre de tono épico y reivindicativo.
El acto en Parque Lezama no solo fue un gesto simbólico en el Día de la Bandera, sino una demostración de fuerza del kirchnerismo en medio de un contexto social y económico complejo. Cristina Kirchner no solo volvió a hablar: volvió a marcar agenda.
